Pongámonos en situación:
Acabamos de dar un beso en tó los morros a una desconocida, estamos en un sitio apartado (por ejemplo la playa) y hay posibilidades de mojar el churrito. Pero ella, educada con los valores clásicos del catolicismo y las buenas costumbres, se cierra en banda una y otra vez.
La cosa esta chunga. La hemos comido toda la boca, le hemos estimulado los pechos convenientemente e incluso le hemos quitado las bragas. La joven esta a punto de correrse y estamos como locos dándole al dedito....
La clave:
¡Stop! ¡Alto! ¡No sigas! Ahí, en ese momento de lujuria y sexorro hay que parar. ¡Como sea! Ya que si seguimos dándole al dedito, la chica se correrá y luego ya no tendrá ganas de jincar.
Parece simple y una tontería, pero muchas veces, enloquecido por el poder que ejerce un dedo en el clítoris de una joven, que es capaz de provocarle contorsiones, espasmos y tiriteras, se llega a masturbar a muchas hasta el final, sólo por observar de cerca lo que es un orgasmo femenino. Notar cómo se aprieta con fuerza en ese momento, cómo gime y grita, cómo te besa con fuerza, como si te quisiera comer entero, retorciéndose de placer. ¡Que momento mas maravilloso, sentir que eso lo provocas tú!
Bonito, sí, pero conlleva un riesgo: Te quedas con las ganas (a no ser que dieses con una cachonda… en cuyo caso estás de enhorabuena. Pero no tentemos a la suerte)
La táctica:
Si quieres meterla la primera noche, pon lo más caliente que puedas a tu chica, con el dedo, la lengua o el pie. Pero nunca dejes que se te corra. Hazle ver que si quiere seguir, el que ha de provocarle ese orgasmo ha de ser tu amiguito “Pito”. No suele fallar.
Como esos momentos son muy sensibles y el simple arrime de Don Pito las vuelve locas, haz lo siguiente: técnica del jueguecito del pito que frota el coñito; no suele fallar.
Te sacas el cimbrel sin que se de cuenta, en medio de ese super-magreo. Cuando ya tengas el dedo gastado de darle tanto, intentas dar el cambiazo. Te acercas a su hendidura y le frotas tu pito ahí donde el dedo hacía de las suyas, muchas no se dan cuenta, y otras se meten tu pito debido a la gran excitera que llevan.
Táctica alternativa:
Para las que no funcione eso, sin que se den cuenta, haces un movimiento de prestigitador, acompañado de una tos tonta y ¡zas!, le endiñas el “Manolillo” endurecido dentro de su chichi. Si no se da cuenta, sigue dándole, que verás qué loca se pone. Si te pilla, le dices: "Era broma tooonta jajaja" y sigues con el dedo.
Momento cumbre:
Una vez que lo hayas conseguido por una u otra vía, el juego consiste en pasarle el prepucio por su “almejita” y frotarlo suavemente sin meterlo del todo. El roce de éste la volverá loca, y tú, hábilmente se lo irás metiendo hasta que ella, excitadísima por haberla rozado tanto su flor de su secreto con tu segundo yo, rompa el hemiciclo y acabe follando como una jabata contigo.
Después de:
Luego, tras el tempestuoso polvo ellas suelen decir:
- "¿Pero qué estoy haciendo? Jamás pensaría que acabaría así."
Tú hazte el sorprendido y di que tampoco te lo esperabas, que la pasión os ha llevado hasta allí.
Algunas suelen mosquearse y te recuerdan la promesa que les hiciste de que no te las ibas a follar, pero claro, por algo esta ese dicho que dice:
”Los chicos prometen, prometen. Pero una vez metido, se jodió lo prometido".
Aunque luego, surge otra variante de este revelador consejo, que es:
"Prometer hasta meter, y después de lo metido, nada de lo prometido"
¡A follar que son dos días!
PD: ¡Viva mi cipote cuando ya no esta cargadote!
PD2: Esta guia no esta exa por mi la encontre en internet y me hizo gracia, no me atribuire el gran merito de decir k la hice yo.
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Iniciado por Borac
